El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento Sevilla, Antonio Rodrigo Torrijos, ha manifestado hoy su profunda preocupación por el futuro de la treintena de artesanos que en estos momentos desarrollan su labor artística y comercial en el Mercado del Postigo, después de conocer la intención del Partido Popular de echarlos de allí en el menor tiempo posible.
Esta decisión, recogida en una reciente resolución de la Junta de Gobierno local en la que se declara la caducidad de la concesión administrativa otorgada en su día a este colectivo para la gestión de dicho edificio municipal y se inicia su reversión al Consistorio, supone, según el concejal de IU, “un ataque frontal en toda regla” a un sector productivo estratégico de la economía local sevillana.
“Consideramos muy desacertado el desalojo que el PP pretende llevar a cabo de estos artesanos”, ha señalado Torrijos, quien ha mostrado su sorpresa por la rapidez con que el Gobierno de Zoido se ha dispuesto a desandar los pasos dados por el ejecutivo municipal anterior, que ya a principios de este año adscribió el inmueble a la Delegación de Economía y Empleo de entonces con el fin de impulsar desde dicho departamento diversas acciones encaminadas a facilitar la difusión del trabajo realizado por este colectivo y a ayudar a potenciar la actividad cultural en el Mercado del Postigo.
Una muestra de la colaboración que existía entre el Ayuntamiento y estos artesanos fue, por ejemplo, la organización conjunta de una exposición de cerámica, que pudo visitarse en este enclave el pasado mes de abril. Asimismo, había proyectada una actuación para readaptar y dotar de contenido, con apoyo municipal, a algunos espacios del Mercado que actualmente se hallan infrautilizados.
Torrijos ha instado al alcalde, Juan Ignacio Zoido, a que aclare si ha comunicado ya a los afectados su propósito de expulsarlos del Postigo, así como cuáles son los planes que baraja para la antigua lonja municipal y si ha previsto algún tipo de alternativas para compensar el revés laboral que con esta medida va a ocasionar a las 30 familias y a los empleados que hasta ahora se ganaban la vida en este lugar de un modo autosuficiente y sin depender de subvenciones.
En opinión del portavoz de IU, “estos artesanos no se merecían el trato tan injusto que están recibiendo por parte de los actuales responsables municipales”. Igualmente, Torrijos ha subrayado el “gran valor de un proyecto ejemplar de autoempleo y emprendimiento que, a saber por qué razones, el PP se ha empeñado en poner en peligro innecesariamente”.
El líder de IU ha recordado que este colectivo lleva ya 30 años ocupando un edificio que estaba abandonado por el Ayuntamiento de entonces y que incluso iba a ser destruido. Y ha destacado cómo el esfuerzo de estos artesanos, agrupados inicialmente en torno a la Asociación Taller 20, permitió recuperarlo y convertirlo en una galería de arte permanente y en un centro cultural, donde se celebran actividades musicales, teatrales y exposiciones sin coste alguno para los ciudadanos.
Para IU, esta noticia confirma la involución que lamentablemente está sufriendo el sector de la artesanía en la capital hispalense tras la llegada del PP a la Alcaldía. Y es que, desgraciadamente, el desalojo del Postigo es sólo la punta del iceberg de un modo de hacer política, que no contempla entre sus prioridades la mejora de los canales de comercialización de las pequeñas empresas artesanas sevillanas ni la adopción de las medidas necesarias para ofrecerles el escaparate más apropiado desde el que exhibir el enorme valor de sus producciones a la ciudadanía.
Según Torrijos, las autorizaciones que el Ayuntamiento está concediendo estos días para la instalación de distintos mercadillos y ferias artesanales, sin control ni criterio alguno sobre la calidad de los artículos que allí se exponen ni sobre los requisitos que han de superar los participantes, representa otro claro indicativo de ese concepto tan peculiar que el nuevo Gobierno local tiene de entender el respaldo a este sector.
A juicio de IU, esta proliferación de mercadillos constituye “un flaco favor” a la industria tradicional artesanal sevillana, que en esta época del año es cuando puede vender mejor sus productos. “Sin embargo, a partir de ahora parece que los artesanos se van a ver obligados a bregar también con una nueva competencia desleal permitida y favorecida, inexplicablemente, desde el propio Ayuntamiento de su ciudad”, ha lamentado Torrijos.
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