Fue el 20 de septiembre de 2008, apenas a un año de haber renovado como parte del gobierno municipal, cuando nuestro compañero Fco. Manuel Silva, “Lolo”, presentó la dimisión.
En aquella rueda de prensa Lolo se fue para poder defenderse de las acusaciones completamente infundadas que Zoido, actual alcalde de Sevilla, había desencadenado contra él. Ha sido una campaña enfurecida, cruenta y coordinada, que consistió en matar a la verdad e inventar 5 delitos hasta que la pieza cayera en el zurrón.
La Audiencia Provincial de Sevilla, en tercera ocasión consecutiva, le ha dicho al juez Zoido que se ha pasado. Que ha utilizado a la justicia para sus fines partidarios y que el fin no justifica los medios.
Aquí hemos colgado el auto de la Audiencia. http://www.iusevillaciudad.org/documentacion/pdf326.pdf
Es un duro alegato y un revés sin matices para todo un magistrado en excedencia que acusó a Lolo de cinco delitos: prevaricación, malversación de caudales públicos, tráfico de influencias, fraude en la contratación pública y usurpación de funciones. Y que concluye con un contundente “no se advierte, ni siquiera indiciariamente, delito alguno”.
Nuestro compañero ha vivido un calvario personal durante estos últimos cuatro años. Ha tenido que justificar permanentemente que nunca cometió delito alguno. Ha tenido que andar demostrando su inocencia, porque un tal Zoido –juez- se empeñaba en mantener abierto un proceso judicial consciente plenamente de que no había caso. Y tuvo que pagar una dura pena de banquillo cuando era completamente inocente.
Lolo ahora lo que le está reclamando es que pida perdón. Como dijo ayer en rueda de prensa, en este país piden perdón hasta los reyes. Porque ganar las elecciones a cualquier precio es un desprecio a la democracia y un ataque furibundo a la libertad.
Zoido ha quedado desautorizado por la justicia con este auto. Y si no pide perdón antes, llevaremos al Pleno una moción, tal y como ha anunciado nuestro portavoz, Antonio Rodrigo Torrijos en la rueda de prensa de ayer para que lo haga en sede consistorial.
Cuatro años. Ha sido todo el tiempo que Zoido –firmaba él personalmente todos los recursos- ha estirado el chicle para destruir a Lolo y de paso a Izquierda Unida. Veremos lo respetuoso que es Zoido con los autos judiciales.
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