En la mañana de hoy, 29 de septiembre, se ha reunido la Comisión de Contratación de TUSSAM a la que pertenece un miembro de Izquierda Unida. El punto más importante de entre los demás, rutinarios en apariencia hasta su mejor estudio, ha sido el del desistimiento del procedimiento de contratación que estaba convocado para el suministro de hasta 60 vehículos convencionales (12 metros), con motor diesel y/o de gas natural comprimido para el período 2010-2012.
El argumento principal de la empresa es que el PP, a su llegada a TUSSAM, se ha encontrado con una magnífica flota que tiene una edad media de alrededor de cinco años y medio de antigüedad, lo que le permite un colchón para estar unos dos años sin renovar vehículos, puesto que seguiría “por debajo de los 8 años de media de las ciudades de nuestro tamaño”.
Izquierda Unida puede comprender que en épocas de crisis se prolongue la vida de los autobuses pero, no obstante, se ha abstenido en la votación por las siguientes razones:
Primero.- La “magnífica” flota con esa edad media de cinco años y medio, ciertamente buen ratio, es una herencia del esfuerzo del Gobierno anterior en el que IU participó para mantener en un buen estado tecnológico y de mantenimiento unos vehículos sometidos a un gran esfuerzo diario, nada comparable con la vida normal de un coche privado y que disfrutan en la actualidad los miles de usuarios del transporte público sevillano.
Segundo.- El no incorporar nuevos autobuses hará que aumente progresivamente el gasto en el mantenimiento y aparecerán averías motivadas por apurar en demasía determinados vehículos.
Tercero.- Para IU, no hay que perder de vista el papel que juegan los pedidos de autobuses de las empresas públicas de transporte en el sector de la industria automovilística –y por tanto en el empleo- y considera que en este momento el sector público debe tirar de la demanda.
Cuarto.- Y, por último, dado que esta es una medida dentro del prometido Plan de Viabilidad, cuyo contenido IU desconoce, la federación de izquierdas ha decidido no posicionarse parcialmente sin tener el conjunto completo.
Por estas razones IU se ha abstenido, solicitando un encuentro con la dirección de la empresa para conocer -con más detalle que por los periódicos- cuáles serán las decisiones estratégicas de dicho plan de viabilidad en materia de red de líneas, personal, financiación, etc., por cuanto son asuntos que no deben llevarse ya cocinados al Consejo de Administración, sino que la oposición tiene que evaluarlos desde la continuidad de la información.
IU no contribuirá al desprestigio de la empresa bandera del transporte público sevillano, como hiciera el PP en su etapa de oposición, sino que, bien al contrario, aportará al debate constructivo un papel propositivo y crítico, tal y como exige su compromiso programático, no sólo porque se trata de un elemento estratégico para la movilidad en la ciudad, sino porque dispone de una plantilla de excelentes profesionales y porque todo ello debe redundar en la mejora de la demanda de transporte público, el incremento de carriles bus y la mejora de la velocidad comercial.
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